Sumario Los ponentes en este debate incluyen canadienses, mexicanos, y estadounidenses. Se acercan el tema por una variedad de disciplinas inclusive la ley, antropología, historia, arqueología, gobernación, "activismo," y educación. Aquí, más que en los otros debates, vemos denominadores comunes y divisiones arreglados por multiples maneras--a veces por país, a veces por profesión, y a veces por experiencia personal. La trayectoria de derechos indígenas ha sido distinto en cada país: a veces dos de los países tienen algo en común que no obtiene en el tercero. Por ejemplo, los Estados Unidos y México (a pesar del levantamiento de los zapatistas) no han enfrentado con la cuestión verdaderamente real de disolución federal con que Canada continúa a enfrentarse. Las "primeras naciones" (grupos indígenas) de Canada jugarían un papel muy serio en qualquier escenario de separación de Quebec. Por el otro lado, los Estados Unidos y Canada tienen sistemas jurídicos semejantes y nociones de autonomía limitada para grupos indígenas que son ajenas del régimen mexicano más centralizado y autoritario. En ocasión, los ponentes se agrupan por edad o etapa de formación--ellos educados durante los años cincuenta, ellos educados luego, teniendo en común enfoques metodológicos y epistemológicos por encima de fronteras nacionales. A veces lo común es algo del fondo personal (por ejemplo ser miembro de un grupo indígena) o una experiencia punto clave que se lleva a una vida y carerra involucrada. Tureen comenta, "Me involucré en los asuntos indios casi por accidente. Durante un verano trabajé para la Oficina de Asuntos de Indios en Dakota del Sur como becario en recreación en un internado fuera de la reservación. Fue un verano extraordinario para mí; realmente cambió mi vida. Sin embargo, tuve que confrontar una situación única. El gobierno tenía, esencialmente, completo control sobre sus vidas. El gobierno federal controlaba su propiedad, controlaba a dónde iban los niños a la escuela, inclusive controlaba si los niños regresarían a casa en el verano o si se quedarían en los internados donde estudiaban durante el invierno. De alguna forma, me daba la sensación de que esto estaba fundamentalmente mal. En el suburbio de San Luis [Missouri] donde yo crecí, el gobierno no tenía ningun tipo de control similar a esto, y ciertamente esa forma de vida no era mi idea de libertad. Fui al internado pensando que estaría ahí por un verano, sin embargo me interesé tanto, que acabé el resto de mi vida trabajando en esta área." Eso es decir que hay pocos "circunstantes" en la área de derechos indígenas, inclusive arqueologos e historiadores quienes son vistos muchas veces como si trabajen solamente en un pasado incambiable. Un aspecto que tienen en común todos los ponentes es un deseo intenso de corregir conceptos falsos que son ampliamente tenidos, y de reavaluar nociones recibidas que han circulado alrededor del asunto de derechos indígenas no sólo en el siglo pasado sino que se estiran hasta la antigüedad. Esa reavaluación incluye los conceptos fundadores de qúe consiste o consistió lo "indígena" en cualquier tiempo o sitio. En consequencia, los ponentes hacen recurso al "archivo" histórico y arqueológico y también a precedencia legal para llegar a definiciones practicables de "autonomía," "soberanía," "derechos colectivos," "derechos individuales/universales," "usos y costumbres," y "resistencia versus asimilación." Entonces, sería mejor oír a estas ponencias tomando en cuenta esta intención de demascarar a mitos. Chamberlin empieza con una paradoja que es anterior a la antigüedad--la "contradición de los pobladores"--localizando el origen de este debate en el encuentro entre gentes cazador-recogedor y gentes poblador y agrícola cuando dice, "No hay nada estacionario de gentes pobladores. El punto clave de estas gentes es que están siempre en movimiento, poblando a la tierra de otros. Sin embargo, cuando los pobladores llegan a esta otra tierra, siempre se imaginan las gentes indígenas como vagabundos, como nomadas, como gentes que se puede mover o desemplacer porque se mueven." Cope nos pide a reavualar a la distinción entre tierra pública y privada en México pre-colombino y colonial y el proceso de desposeer a la indios de sus tierras. Se nota Cope que consideramos frecuentamente que el proceso fue inmenso, inmediato y sin resistencia mucha. Como él se califica, un largo y intermitente exitoso proceso de resistencia legal fue hecho sobre tres siglos que está ligado directamente con las estrategias y manifestaciones de demandas indígenas de hoy. Deloria y Stavenhagen discuten modelos de asimilación y segregación de grupos indígenas, comentando que allianzas inesperadas han formado y ciertas allianzas esperadas no han aparecido (por ejemplo la "solidaridad" supuesta entre gobiernos del tercer mundo y gentes indígenas). Diamond y Valdés-Ugalde enumeran algunos de los aspectos más problemáticos de autonomía indígena y desarrollo económico. Gentes indígenas no son mayordomos estancionarios de tierras de antepasados como aclaran Fox y Stephen--son capaces de crear diásporas que trascenden regiones y países y lo hacen, y no se puede describir sus luchas solamente en términos de tierra o territorios. Finalmente, Gómez y otros señalan a las dificultades planteadas por desigualdades internas de grupos indígenas (como prácticas sexistas) y cómo estos problemas se relatan al proceso más amplio de establecer mínimos derechos humanos universales.